jueves, 5 de febrero de 2009

Mini Relatos en Filosofía. (1)

Lo más oscuro ha sido escrito por Diego, lo más claro por mi.

[12/1/09 12:22 P.M.]

Un aullido desgarró el silencio de la noche. Escasos segundos restaban para el fin de sus días. De pie, con la cabeza alta, miraba al vacío con tristeza, consciente de cada instante, de cada célula de su cuerpo.

Parpadeó, pero no pareció despertar de aquel encantamiento. Léntamente dirigió su mano al colgante del que nunca se separaría, y, abriéndolo, recordó cómo había cambiado todo en tan poco tiempo. Cada vez faltaba menos. No había lágrimas en sus ojos, solo una irónica sonrisa resaltaba en su rostro, bañado en la más profunda indiferencia.

Miró de nuevo las dos fotografías del interior del relicario. Sólo unos segundos más.

Haría seis años desde que él y yo nos habíamos conocido, seis felices años. Pero ahora... Otro aullido, este más próximo. Cada vez estaba más segura de lo que tenía que hacer, no lo podía dejar allí, no podía... Escuché como poco a poco sus pasos se iban aproximando.

Unas nubes cubrieron la luna llena y más blanca de lo que nunca había visto. Se situó de nuevo en el borde del precipicio. De espaldas al vacío y con los brazos extendidos hacia la oscuridad del bosque.

Oyó un gruñido. Él ya había llegado. Un brillo entre los matorrales. Un movimiento apenas perceptible y una criatura salió de la nada. Era él. Su pesadilla, su sueño eterno que ahora la perseguía.

Ella ya sabía que no era el mismo, pero aún tenía la esperanza de que allí, en el fondo de su alma, siguiese él. Fueron tan solo unos segundos, unos preciosos segundos que ella esperó a que la criatura tomase la decisión. Saltó hacia ella, pero ella no se apartó. Sus brazos se encontraron con el cuerpo de aquel ser atormentado. Y juntos, de nuevo, cayeron al vacío. Juntos... como lo habían estado tiempo atrás y como siempre lo estarían en el colgante de ella. Dos almas unidas, jamás se separarán.


[12/1/09 12:45 P.M.]






*Never will be good enough for her (Him, they)